mañana me voy a margarita, pero me metì en este cybercafè porque necesito escribir, porque estoy como en desventaja, porque me quedè sin respuestas, no sin preguntas, pero sì sin respuestas. a veces creo que soy un bicho peligroso, que asì como el rey Midas tocaba las cosas y las convertìa en oro, yo convierto a la gente en años luz de distancia. hoy soy transparente. invisible. como si me hubiera desaparecido del mundo. como si nunca hubiera existido, como si no hubiese dejado un reguero de migajas por ahì por la vida, a mi paso. ¿dònde está el camino? ¿por què se perdiò mi rastro? ¿por què dejè de existir en esa, su alma? ¿què error fue el que cometì? es que no entiendo, de tan equivocada ya ni sé cuál de mis tantas torpezas lo alejan a setecientos mil kilòmetros por hora. probablemente escribir este post sea otra màs de mis torpezas. quizás pase a su lado algùn dìa (porque Caracas es grande pero suele ser pequeña tambièn) y no me vea. ¿quièn soy? invisible (como la niña de mi novela). al fin y al cabo puedo ser cualquiera, los seres humanos, a fin de cuentas, somos un producto con el mismo adn, lo demàs es accesorio. recuerdo a yeats, un poema suyo que dice algo asì como que se ama hasta lo que desaparece. es cierto, yo sè querer asì, sè còmo se quiere a un fantasma. sòlo que este fantasma me mirò con unos ojos tan verdaderos que no siento nostalgia, ni necesidad (como otras veces) sino la màs verdadera pasiòn humana. debe ser asì como cuando uno le ve los ojos a la muerte. la muerte es algo en estado puro. bueno, yo le vi los ojos a la verdad, tambièn en estado puro. y eso no se olvida, coño. yo no entiendo què sucediò. y sin embargo no quiero tocarlo, como el rey Midas, para no convertirlo no en oro sino en ceniza. sin embargo necesito entender, al menos para seguir teniendo esperanzas, para creer que, con èl, sin èl, a pesar de èl, a pesar de mì, el amor existe. el amor, ese, el irreverente, el absoluto, el que no pide ni pregunta. el amor que se rìe contigo y te abraza y te calma y te entiende y no te juzga y no te reprocha y no te culpa de nada. me sometì a la prueba del desamor para jurarme a pie juntillas y convencerme (convencidísima estoy) que prefiero el amor èse (el distante, el fantasmagórico, al que no puedo tocar porque lo arruino, lo convierto no en oro, sino en desazòn y en insomnio), prefiero ese amor, ese, el que le tengo, aunque no sea para mì y le deseo la felicidad toda. aunque en realidad quiera verlo y tocarlo. usarè guantes. no soy el rey midas. me guardo la avaricia. (se acabò el tiempo en esta computadora, tendrè que revisar mis post luego) |
15 comentarios:
No olvidaré jamás esa escena en que Robert Duval enviaba a unos chamitos a hacer surf en medio de un tiroteo, en aquella película Apocalipsis Ahora... Tampoco la famosa cabalgata de las Walkirias... Es apoteósico ver aquel psicópata con sombrero tejano y el pecho desnudo decir que el napalm huele a victoria. Vaya, vaya, vaya... Uno ve un personaje enloquecido comportarse dentro del sentido de la razón... Atacar, arrasar una aldea y sentir la victoria en el olor a gasoleo del napalm...
¿Qué por qué digo esto?
Porque el tipo estaba loco, pero se comportaba como un hombre victorioso. El que otros soldados en combate vieran a sus compañeros haciendo surf daría una sensación de seguridad exótica y la suficiente confianza para seguir matando vietnamitas. A partir de aquí, el tipo ya no parece tan loco, de la misma manera que tampoco lo es que el vietcong al escuchar al famoso antisemita y gran compositor sintiera que les vendría encima el famoso napalm, la lluvia de la victoria, de los otros, una especie de meada desde el aire, pero de puro fuego...
¿Qué? ¿Por qué digo esto?
“la muerte es algo en estado puro. bueno, yo le vi los ojos a la verdad, tambièn en estado puro. y eso no se olvida, coño.”
Eso reza el post de mi querida Maga, y perdona Maga, yo tengo que decirte que... no es así... nosotros estamos en estado puro, nosotros somos la sal de la tierra, el drama eterno, la visión de larga distancia de los griegos. Nosotros somos el aquí y el ahora, porque la muerte es el fin... Prueba a morirte, y entenderás lo que es dejar un estado puro...
Pajas mentales a parte, leo después:
“el amor, ese, el irreverente, el absoluto, el que no pide ni pregunta. el amor que se rìe contigo y te abraza y te calma y te entiende y no te juzga y no te reprocha y no te culpa de nada.”
Que poético, y pana, entonces es mejor decir: Quiero más de eso, y no soltar eso del amor que no quiere pero quiere... Espera que todavía no enfundo mi Magnum 45 mm, esa que lleva “a mi recto culo por el recto camino alejado del mal”... Pana, yo diría, en tu caso, porque se trata de compartir, con dolerse, con algo, ¿no? Yo diría que estoy jodido, pero que entiendo... Es decir, a lo mejor soy demasiado impaciente, a lo mejor lo quiero todo YA, pero sobre todo, y casi seguro me estoy negando la posibilidad de curarme y ser feliz.
Si uno no está equilibrado, debe comportarse como si lo estuviera. Si uno no está sano, debe comportarse como si lo estuviera para facilitar el camino de la curación... Pero este ay, ay, ay... deja un regusto al cuento del lobo... Cuando te duelas de verdad, cuando ese verdadero amor que encontrarás seguro porque te lo mereces, aparezca... y si por un casual la vaina se jode, todo puede ocurrir, y te rompen el corazón por sorpresa y te dueles de verdad, la gente pensará que es una suerte de continuidad de ese dolor no resuelto de un amor que no valió para nada y que no tiene nada que ver con el actual... Habrá que revisar si ese “¡ay, ay, ay! Conecta con el otro ¡Ay, ay, ay! Y habrá que ver si de lo que se trata es de enlazar un set de ayes con el otro para justificar los ardores del propio cuerpo, de la propia alma. A lo mejor, estamos enamorados del amor y eso nos hiere, nos machaca burda porque el amor es siempre otra cosa.
Ahora mírame querida Maga, mírame bien, con el sol a mis espaldas mientras una brisita me refresca el cogote... No te compadezco, no te tengo lástima, soy tu amigo y te espero en el camino de la salud emocional... Si no... I shut you whit mi Magnum 45... Esa que lleva mi recto por el recto camino alejado del mal”...
Bueno Mireya, desde aquí el cariño, aunque esta ves desde la confrontación... Querida, deja la lloradera...
Aparte de incentivarla a seguir adelante, agradezco que se haya tomado la molestia de leer mi blog y dejar un comentario positivo. Me aventuro a decir que a las dos nos embarga una tristeza que saldamos con manos, pies y brazos dispuestos a estar allí, para acolcharnos el pesar. Eso consuela cuando hay tunitas clavadas por todo el camino del alma.
Y es que amar es tan sublime que hace vivir y morir a la vez.A veces tan descarado que sigue allí haciendo muecas y permitiendo que nos acostumbremos a su presencia aunque no sea lo más deseable ni recomendable.
Más que por experiencia, por convicción tambaleante pero aún latente le digo que nada malo puede quedar de querer. Aunque en el intermedio se nos vuelva agónico; aunque en el intermedio nos vayamos convirtiendo en una especie de Midas que en vez de oro deje desolación y confusión a su paso. En alguno momento la balanza se inclina a favor y uno ordeña todo ese aprendizaje -es mi táctica de autoyuda que ojalá le ayude a usted-.
Porque hay momentos en que no importa lo que diga el mundo, lo que se diga una misma y lo que también el amor diga: el muy inoportuno irreverente sigue allí y es motivo de rebeliones -es mi caso-.
Sepa que, aunque haya sido la curiosidad y la casualidad el motivo de mi ingreso a este blog, puede contar con estas manos y este sentimiento para socorrerla si hubiere que hacerlo.
Ojalá lo que venga tenga un mejor color y también persista la intención de compartirlo al mundo, de la manera tan excelsa como veo, recrea la vida.
Y que ese amor que no estorba, no juzga, entorpece pero hace vivir de alguna forma la guíe.
La abrazo!
vaya, vaya...estos colosos no me dejan aliento para expresarme...trataré de ser la primera la proxima vez...así no me stresso ni se "pasma" mi musa...un beso
El tiempo sabrá por que camino debes seguir.
besos
ani...tengo que dejar mi casa porque me la estàn pidiendo, esa es otra de las cosas que tengo que hacer, pero no tengo miedo, quizàs un poquito de tristeza, pero miedo no...
no he podido leer todos los comment bien, ni el tuyo ni el de carmelo, sòlo por encima...quizàs no se entendiò bien mi post...quizàs fue eso ùnicamente, pues ahora escribo muy ràpido y en contados minutos desde cybercafès...ahora escribo diarios, como cuando era chamita...
bueno, quizàs carmelo tenga razòn siempre al regañarme, pero es que me equivoco, no sè còmo hacer las cosas, no tengo el manual a mano, por eso presido este pais, este reino que me habita.
estuve bien en margarita, y tengo que escribir algo sobre un paseo a la isla de coche que seguro serà superdivertido para los que quieren a la maga que rìe
un abrazo
ME OPONGO...
¿Derecha?
..cuando escribirás otrò post..un besote y JACUNABATATA
estoy en caracas...mañana escribo con más calma, hoy estoy muy cansada...
La gran filósofa Venezolana, Carmen Victoria Pérez -la mismita del Miss Venezuela- dijo una vez: "De amor, nadie se muere, pero cómo se agoniza"
Maga, date un tiempo para ti.
De vez en cuando hay que ser egoísta, hacer limpieza interna, respirar y pa’l coño con los enfermos.
A la final, quién importa somos nosotros. Por qué lo digo, pues nuestro mundo nace, crece y muere con nosotros. Cuando decidamos irnos, el mundo de los demás sigue, para nosotros el nuestro terminó y ya no hay vuelta a tras. Así que a vivir amiga, a vivir!!!
Sé que no soy quién para dar directrices a nadie, es tan sólo un consejo.
Publicar un comentario